miércoles, 28 de enero de 2009

Más dura será la caída.

Más dura será la caída. Gran verdad. Aparte de una magnífica película protagonizada por Humphrey Bogart y dirigida por Mark Robson en 1956, aquí os presento un documento, a la altura del film referido, sobre la vacuidad de la fama. Qué poca memoria tenemos con nuestros ídolos; qué fatal destino a menudo les espera cuando su popularidad ha desaparecido. Hay tantos nombres a los que la temprana y a veces poco merecida fama ha destruido: Joselito, Mickey Rooney, Ángel Cristo, MacAulay Culkin... Hoy recordamos a Polilla y Pantalones en este apasionante documental que ha de servir como recuerdo a estas antaño estrellas del dibujo animado y de aviso sobre los peligros que encierra el éxito.


No queda sino felicitar al realizador del film, Ángel González, por mostrar en toda su crudeza los peligros de la fama, y a su productora Angelitoons, por su valentía a la hora de afrontar este preocupante tema.
Para más obras del autor: http://www.angelitoons.com/



4 comentarios:

Unknown dijo...

pelota pelota....

Anónimo dijo...

Yo no la había visto, pero me parece una película muy buena. Me ha tocado muy dentro, es divertida, fresca y te hace reflexionar.
¿Ha obtenido algún premio en el festival de cortos de Ciudad Real o ni siquiera la seleccionaron porque el director no conocía a nadie del jurado?

Wayne dijo...

Grandes películas sin oscars: Blade Runner, El Gran Dictador, La Gran Evasión, El Sueño Eterno,el Hombre que mató a Liberty Valance, Con la Muerte en los Talones, Ninotchka, Río Rojo... ¿He de seguir?... Ser o no ser, Cantando bajo la lluvia, La extraña pareja, El Hombre que pudo reinar, Esmeralda la Zíngara, el Color Púrpura, Un día en las carreras, Charada, Terciopelo Azul, Las aventuras de Ford Fairlane...

Anónimo dijo...

Obra maestra que retrata con venenosa ironía una crítica a los propios excesos del mundo de Hollywood. El paso del tiempo, los egos inmensos y el desesperado intento de recuperar el esplendor perdido se concentran en la violenta e impresionante mirada de Polilla. Imprescindible.