martes, 26 de enero de 2010

Garfield: mi héroe (VIII)

¿Os sabéis la anécdota de ese libro perdido durante años y que se encontraba debajo de la maceta de un poto en lo alto de un mueble para que la planta sobresaliera y pudiera verse para que "quedara mejor"? Parece que mi madre también tiene algo de Garfield...






3 comentarios:

Colorines dijo...

Por supuesto que la conocemos, a casi nadie le gustan las mudanzas pero tienen su parte positiva.
Yo sigo a lo mio
Parecido: La primera viñeta me recuerda a la primera parte de “No te rías que es peor” en la que se daban usos y utilidades absurdos a los más diversos objetos y si no me equivoco a ti te hacía reír bastante (se que no eras el único pero había que tener estómago para ver y escuchar a Barragán)
Diferencia: Garfield te gana por un microsegundo en tomar la decisión correcta, es una diferencia muy sutil, solo la noto yo.

Wayne dijo...

Colorines, ya estás tardando en ir a comprar libros para la estantería nueva. Compra unos cuántos con el lomo rojo, que es el color que le va al pasillo, y elígelos por el tamaño, que "desmadejados" quedan muy mal.

Colorines dijo...

Pero ¿como se compran? ¿al peso? ¿por volumen? ¿por unidad? ¿que pido, un celemín de libros o una espuerta? ¡que alguien me ayude!